El dolor de cabeza o cefalea, un síntoma aparentemente trivial, es un problema cotidiano frecuente. Los pacientes con dolores de cabeza agudos y crónicos son una carga tanto para el médico de medicina general como para los diversos especialistas, debido a la frecuencia y a la persistencia de las molestias y sobre todo, a la esperanza que ponen en una terapia eficaz.

El dolor de cabeza o cefalea crónica es posiblemente el padecimiento mas extendido en los modernos estados civilizados, ya que diversas estimaciones, un 4-8% de la población mundial acude por este motivo al médico o emplea un tratamiento no profesional. Así el médico general se enfrenta casi a diario con pacientes a quienes desearía recomendar un tratamiento más satisfactorio que el meramente sintomático.

Se considera que el dolor de cabeza o cefalea crónica que el dolor localizado en el área cráneo-cérvico-facial que se presenta durante más de días a la semana en los dos últimos años de la fecha de la primera consulta relativa al problema.

La mayor parte de las veces son pacientes que han sido tratados por médicos de medicina general o especialistas como otorrinolaringolos, por problemas diagnosticados como cefaleas de tensión o vasculares, dolor de oídos, tinnitus, acufenos, dolor en la articulación temporomandibular durante la masticación, al bostezo o incluso durante el habla. Normalmente el tratamiento consiste en la administración de algún tipo de medicamento cuando, posiblemente, la solución se encuentre en una exploración rigurosa del aparato estomatognatico que comprende la boca y sus componentes: los dientes, tejidos blandos, musculatura masticatoria junto con sus tendones y fascias, así como la relación de todas ellas durante el ejercicio masticatorio.

El bruxismo y el estrés que sufre la población es un fenómeno universal y que se relaciona íntimamente con la presencia de cefaleas y el llamado Síndrome de Costen descrito en 1936 por el otorrino norteamericano James S. Costen.

El citado Costen relataba que la mayor parte de cefaleas, dolor cervico facial y dolor periauricular estaba relacionado con la pérdida del soporte de ambas arcadas dentarias en la zona posterior, es decir, el problema era el edentulismo (falta de piezas dentarias) que habían sido exodonciadas por caries o enfermedad periodontal y que provocaban una pérdida de la dimensión vertical de la boca, maloclusión y una posición errónea del cóndilo mandibular dentro la cavidad glenoidea que a su vez provoca que el disco mandibular no se encuentre en su posición correcta, de ahí los chasquidos que se provocan en la apertura y cierre de la boca y durante la masticación, bloqueos y demás patología articular.

Todo esto nos lleva a pensar que la odontología tiene una parte muy importante que decir ante un paciente que presenta algún tipo de cefalea o dolor de cabeza crónico, cefalea vascular, jaqueca, así como neuralgias craneales y faciales y como los estados dolorosos de origen cervical del cráneo y la cara.